Puede sonar absurdo, pero es la realidad. Las denominadas Organizaciones Sociales, quienes se creen los dueños del departamento de Arauca en un reciente pasquín, porque no tiene ni firmas, como representantes, dieron a conocer la directriz a la comunidad del Sarare en medio del denominado Paro Cívico que quieren imponer en la región y de la que comparten unos pocos, porque los demás están atemorizados y les da miedo denunciar por miedo a las represalias.
En uno de los apartes señaló que este domingo 30 de mayo, autorizaron para que las actividades comerciales se desarrollen de manera normal en el horario de 6:00 de la mañana a 9:00 de la noche, paro luego volver a cerrar y generar la parálisis hasta finalizar la jornada de Paro Cívico programado hasta el día miércoles 02 de junio.
Las Organizaciones Sociales con algunos gremios donde no está representado todo el sentir de los gremios productivos del departamento de Arauca, concertaron esta imposición del denominado Paro Cívico, del que también comparte la Cámara de Comercio del Piedemonte Llanero, tal como lo señalan los integrantes que promueven el atraso de la región.
El acatamiento del famoso Paro Cívico se ha cumplido en su totalidad en la región del Sarare, de donde se imparten las órdenes de los promotores. لعبة الكازينو En otros municipios han sido reacios a cumplir con esta directriz, teniendo en cuenta la difícil situación económica por la que han tenido que pasar sus habitantes y el sector comercio donde se han perdido oportunidades laborales, mientras los campesinos han tenido que paralizar la producción y perder alguno de sus productos.
La mayoría de la comunidad araucana, como gremios de la producción, comerciantes, transportadores y la gente del común han rechazado esta acción de las Organizaciones Sociales de imponer un cese de todas las actividades, teniendo como única petición de no más paros, ni cívicos, como armados, que lo que se quiere es trabajar y salir adelante en medio de esta situación que en parte ha contribuido la pandemia del Covid-19.
