El Gobierno denunció nexos entre la dictadura y grupos terroristas y narcotraficantes.
En días pasados el Gobierno de Nicolás Maduro le envió una carta a la ONU pidiéndole investigar la violencia en la frontera con Colombia.
A propósito, este miércoles la canciller Claudia Blum también le remitió una comunicación al secretario general de las Naciones Unidas, y al Consejo de Seguridad, en la que advierte que la dictadura busca desviar la atención internacional “frente a su relación cómplice con grupos de narcotraficantes y terroristas”.
“Informamos a la ONU el más reciente desplazamiento masivo de 5.737 personas hacia el municipio colombiano de Arauquita, producido desde el 21 de marzo. Desplazamiento ocasionado por las operaciones del aparato militar del régimen, de manera indiscriminada y sin apego al Derecho Internacional Humanitario”, señaló la ministra.
En su carta agregó que el régimen de Venezuela es totalitario y no respeta ningún marco de legalidad.
Igualmente, reiteró su preocupación por el colapso institucional, económico y social en el vecino país, y la crisis política que ha destruido la democracia, “convirtiéndolo en un Estado fallido”.