Indignación e importancia frente a este caso es lo que ha expresado la comunidad en el municipio fronterizo de Arauquita. Allí se exige que la menor de 5 años de edad, Lorena Tocaría, regrese al seno de su hogar con doña Edelmira Vivas y su esposo, una pareja que en medio de su condición humilde le han brindado todo y nunca le ha faltado nada.
La alegría de la pequeña se apagó y ahora solo reina el llanto al ser despegada de su núcleo familiar. El cuidado de su madre de crianza no será el mismo al que quieren brindarle sus padres biológicos que la dejaron abandonada en el área de neonatos recién nacida hace cinco años en el municipio de Arauquita.
Según las primeras informaciones suministradas es que desde el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar ICBF se impartió la orden de que la pequeña regresara al seno de su hogar con sus padres biológicos, indígenas quienes viven en precarias condiciones.
En un vídeo desgarrador de cómo la menor en medio del llanto se niega a dejar a sus padres que hasta el momento les ha dado todo, un techo digno, alimentación, estudios y el cariño que nunca tuvo de sus padres que hoy la reclaman para llevarla a vivir en condiciones indignas, como acostumbras a vivir las comunidades indígenas en el departamento de Arauca.
Y es que los resguardos indígenas de cada municipio viven de manera diferente, en cadena de miseria, aguantando hambre, sin locaciones dignas de techo, como tampoco de servicios públicos y salud, muchos de ellos sobreviven de milagro.
Con solo observar el vídeo se le parte a uno el alma y la historia de esta pequeña de 5 años roba lágrimas por ser tan sensible y que se convierte en un tema de injusticia de las decisiones de las instituciones del Estado colombiano.
Se dijo que los padres de la recién nacida, Lorena Qüenza Tocaría, quienes hacen parte del resguardo El Vigía en el municipio de Arauquita, dejaron abandonada su bebé en la unidad de neonatos del Hospital San Lorenzo de Arauquita debido a que no tenían cómo comprar los medicamentos exigidos en esa época por los médicos del centro asistencial para mejor la salud de la pequeña.
Para ese entonces apareció doña Edelmira Vivas y su esposo quienes terminaron recibiendo a la bebé y en medio de su condición le ofrecen un techo, cariño y el bienestar como padres sustitutos, el que hoy le arrebata el ICBF.
El Cacique y el Gobernador indígena de este resguardo, al conocer la situación de abandono que hicieron estos padres hacen cumplir un mandato que consistente en castigar a los indígenas que abandonan a los niños, por lo que se eleva esta petición del caso de la pequeña Lorena al ICBF, la que determina que los padres naturales deben recibir la niña, una decisión traumática para ella y los padres sustitutos que durante cinco años cuidaron de la pequeña que hoy indigna a toda una sociedad en el departamento de Arauca y las redes sociales.
A fecha de hoy, las condiciones de vida de Lorena han cambiado completamente. En Arauca todo el mundo conoce en qué condiciones se viven en las comunidades indígenas en el departamento de Arauca. Carentes de todo, de salud, agua potable, expuestas a los zancudos, carentes de una vivienda digna, a estas precarias condiciones es sometida hoy esta pequeña que por una decisión arbitraria de los cabildos y de una institución del Estado que debe velar por las condiciones sanas de todos los menores de edad.
Se espera que este caso tenga un desenlace feliz y la pequeña pueda volver a su entorno con el que nació, bajo los cuidados de doña Edelmira Vivas y su esposo, no queremos que Lorena de tan solo 5 años de edad, sea presa de lo que a diario se vive en estos resguardos, abusos, maltratos, prostitución, drogadicción, condición de calle y prostitución en la que están inmersos muchos de nuestros indígenas que a diario deambulan en las calles de Arauca, como de otros municipios del departamento de Arauca.
Que sea la justicia que obre para que esta menor esté en las mejores condiciones de vida y no sea presa de los adultos y sus comunidades.